Volar está en nuestro ADN, un anhelo que desde la Antigüedad nos apasiona.

Si Dédalo, según la mitología griega, construyó unas alas para escapar de su prisión, volar en globo nos liberará de las ataduras de la gravedad. Nos dejaremos llevar por el viento, la aventura en primera persona

Volar en un globo aerostático disfrutará de la naturaleza en su estado puro, estimulado sus sentidos y emociones que supone flotar entre las nubes. Una experiencia que siempre recordará.

Ante sus ojos, el paisaje se transforma en un enorme tapiz lleno de colores, que no dejará de sorprenderle a cada instante.

Globotur pone el mundo bajo sus pies.

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